El Ministerio de Sanidad ha aprobado el calendario de incorporación de diferentes colectivos de pacientes con diabetes mellitus tipo 1 para el acceso a dispositivos tipo flash para la determinación de glucosa. Según una resolución de la directora general de Cartera Básica de Servicios del SNS y Farmacia, Patricia Lacruz, todos los pacientes con diabetes tipo 1 deberán poder acceder a estos dispositivos antes del 31 de diciembre de 2020.
El calendario se inicia con la incorporación, en el primer semestre de 2019 de los pacientes adultos con discapacidad visual o limitaciones funcionales graves que les imposibilite realizar punciones digitales o con trastornos funcionales cognitivos que les impida expresar la situación de hipoglucemia; los pacientes que sufran hipoglucemias de repetición, entendiendo por tales las que se producen al menos 4 veces por semana o cuando tengan un 10% de los valores de las lecturas del glucómetro por debajo de los 70 mg/dl tras realizar un promedio de 6 controles de glucemia capilar al día así como las acientes embarazadas, así como las que planifiquen un embarazo natural o mediante reproducción humana asistida: Primer semestre de 2019.
Por su parte, el resto de pacientes, independientemente de que tenga control de los niveles de HbA1c (>7,5%) o no (<7,5%), deberán poder acceder antes del 31 de diciembre de 2020.
El sistema de monitorización de glucosa mediante sensores (tipo flash) podrá ser indicado en el Sistema Nacional de Salud por los endocrinólogos, como alternativa a las tiras reactivas de glucemia, para pacientes adultos (de 18 años o más) diagnosticados de diabetes mellitus tipo 1 (DM1) que realicen terapia intensiva con insulina(múltiples dosis diarias o con bomba de insulina), y requieran realizar al menos seis punciones digitales al día para la automonitorización de la glucosa en sangre.
Tal y como se indica en la resolución, cuando un paciente reúna más de uno de los anteriores requisitos, se considerará incluido en el colectivo al que le corresponda la prioridad más alta.
Además, para que un usuario adolescente que esté utilizando el dispositivo no se quede sin él, se especifica que en el caso de que el estudio de monitorización en niños y adolescentes de 4-17 años finalizase antes de que se lleve a cabo la extensión del uso del dispositivo a todos los colectivos de adultos, se continuará facilitando el sensor a los adolescentes que vengan utilizándolo cuando superen los 17 años.